domingo, 19 de abril de 2015

Inmunonutrición en Enfermedad Inflamatoria Intestinal.

Este es un resumen de la ponencia Inmunonutrición en Enfermedad Inflamatoria Intestinal que la Dra. Ascensión Marcos, Vicepresidenta de la Sociedad Española de Probióticos y Prebióticos, ofreció en la última Jornada Informativa para Pacientes de Enfermedad Inflamatoria Intestinal organizada por ACCU Madrid.
Las enfermedades inflamatorias intestinales (EII) se definen como patología que cursan con inflamación de causa desconocía, preferencia en el tracto gastrointestinal. En este grupo de enfermedades destacan la enfermedad de Crohn (EC) y la colitis ulcerosa (CU).
Como las EII son de causa desconocida, hay varios factores del sistema inmune a los que estas enfermedades inflamatorias son más susceptibles, entre ellosvamos a comentar los mecanismos de tolerancia y maduración del sistema inmune durante el embarazo, lactancia materna y su relación con la microbiota. Otros de los factores que afecta al sistema inmune y EII es la malnutrición. Estos temas tan novedosos e interesantes son en los que el Grupo de Inmunonutrición del CSIC lleva trabajando durante la última década.
La malnutrición en la EII se debe a las consecuencias de la propia enfermedad. La afectación del sistema digestivo influye en la digestión y absorción de los nutrientes, además del gasto y pérdida de estos por el proceso inflamatorio.
• La malnutrición puede producirse por un aporte deficitario de calorías, proteínas y micronutrientes; dentro de las vitaminas, las que más implicaciones tendrían sobre el sistema inmune son la A, D, B6, B12 y folatos y entre los minerales destacan el hierro, zinc, cobre y selenio. Hay otros nutrientes como son los ácidos omega 3 que son importantes por sus propiedades antiinflamatorias.
• La malnutrición afecta al sistema inmune, siendo más vulnerables los sujetos en estas condiciones a las infecciones, las alergias y los procesos inflamatorios, lo que retrasan la recuperación de la enfermedad y conlleva un peor estado físico y anímico.
• Por todo ello, es importante tener un diagnóstico y tratamiento adecuados y tempranos de la malnutrición en la EII.
• Es aconsejable también realizar una actividad física ligera o moderada en el EII, ya que la actividad física potencia adecuadamente nuestro sistema de defensas así como el aparato digestivo, tanto en su función como en su regulación.

• La leche materna y la dieta durante el embarazo, lactancia e infancia tienen importantes acciones en la tolerancia y maduración del sistema inmune, lo que va a repercutir en el organismo a lo largo de toda la vida.
• El sistema de tolerancia y maduración del sistema inmune intestinal del neonato se desarrolla fundamentalmente después del parto. En particular con la dieta entran no solo nutrientes sino también nuevos antígenos que van a conformar las características del sistema inmune y también de la propia microbiota.
• Microbiota intestinal: Está formada por multitud de microrganismos comensales vivos (bacterias, protozoos, levaduras y virus) que se encuentran en el tracto gastrointestinal y que realizan funciones beneficiosas para su hospedador. Son importantes en la homeostasis intestinal y se ha descubierto que ejercen un papel muy importante en la tolerancia temprana hacia antígenos extraños.
• Funciones de nutrición y metabolismo: recupera ácidos grasos de cadena corta e influye en gran medida en la absorción de los micronutrientes (vitaminas y minerales)
• Funciones de protección: previenen la invasión de agentes infecciosos y sobrecrecimientos de especies patógenas.
• Funciones tróficas: proliferación y diferenciación del epitelio intestinal y desarrollo y modulación de sistema inmunitario como explicaremos a continuación:
• Se ha descrito el papel clave que la microbiota de la madre desempeña en el desarrollo y maduración del sistema inmune del neonato, proceso que se inicia en el útero. Tras el nacimiento, la leche materna continua con este proceso, gracias a las sustancias que contiene, en particular: probióticas, prebióticas, antimicrobianas, antinflamatorias, todas ellas moduladoras de la respuesta inmunitaria.
• Durante la lactancia la microbiota intestinal de la madre viaja a través de la las vías linfáticas y la sangre periférica hacia las mamas, donde se fabrica la leche materna.
• Gracias a las nuevas técnicas utilizadas en el campo de la Genética y al procesamiento de datos con la bioinformática, hoy es posible analizar genes de la microbiota y diferenciar unos microorganismos de otros. Un estudio a nivel internacional, que analiza el metagenoma de la microbiota, ha descubierto que en la EII existe una alteración de la microbiota intestinal, tanto en cantidad como en la calidad de los microorganismos que la componen. En la enfermedad de Crohn se ha descubierto la ausencia de aproximadamente 500 bacterias que tienen las personas sanas. Esto es un importante descubrimiento que puede llegar a ser una gran revolución en el conocimiento y tratamiento de la EII y de otras enfermedades. La utilización de técnicas o métodos para mejorar la microbiota, todavía en investigación, puede llegar a ser una gran revolución para la EII.

• ¿Cómo se puede regenerar nuestra microbiota, antiguamente llamada flora intestinal?
A continuación se detallan algunos elementos importantes a ingerir que a su vez ejercen un importante papel sobre el sistema inmunitario:
• Probióticos: se definen como microorganismos vivos del tracto gastrointestinal; se ha documentado clínicamente que presentan efectos saludables en los humanos cuando se ingieren en las cantidades adecuadas. Han sido usados de formas tradicionales como componentes alimentarios que ayudan al organismo. Se ingieren como parte de alimentos fermentados, sobre todo en lácteos frescos, y también como nutracéuticos en forma de cápsulas. 
• Prebióticos: ingredientes no digeribles de los alimentos que tienen efectos beneficiosos para el hospedador porque producen una estimulación selectiva del crecimiento y de la actividad de la microbiota. Algunos ejemplos son: inulina, fructooligosacáridos, oligofructosacáridos…. 
• Simbióticos: son combinaciones de probióticos y prebióticos que se administran por vía oral de modo simultáneo para conseguir efectos sinérgicos entre los dos componentes.
• Trasplante fecal: es un proceso para trasmitir microbiota intestinal de un donante sano para restaurar la microbiota del receptor que tiene algún problema de disbiosis o alteración de su microbiota intestinal. Este procedimiento se encuentra en investigación y se realiza en los hospitales bajo rigurosa vigilancia médica. 
• En la EII hasta la fecha sólo existen evidencias científicas en el tratamiento de la reservoritis, las demás acciones son para prevenir o mejorar la microbiota intestinal.
• En el momento actual se necesita mucha más investigación para solucionar este grupo de enfermedades que cada vez son más comunes y producen una distorsión muy importante en la calidad de vida de los pacientes. España cuenta con gran infraestructura para estas investigaciones y es una de las potencias mundiales en esta materia, como se ha visto en los últimos grandes descubrimientos sobre la microbiota. Sin embargo, la crisis está haciendo un daño muy considerable, ya que se necesita una gran fuente de financiación para conseguir mejoras sustanciosas en las características de la EII.

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