miércoles, 30 de marzo de 2016

Diferencia entre EII y SII.

La Enfermedad Inflamatoria Intestinal es una patología crónica que engloba la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, pero en muchas ocasiones se puede confundir con el Síndrome de Intestino Irritable (SII) porque comparten algunos síntomas.
La principal diferencia entre la Enfermedad Inflamatoria Intestinal y el Síndrome de Intestino Irritable, es que el SII es un trastorno funcional del intestino, mientras que la EII provoca inflamación que puede producir daño permanente en el aparato digestivo.
En las siguientes infografías podéis consultar los síntomas generales de la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa y las diferencias con el Síndrome de Intestino Irritable:

España, el único país de la UE sin nutricionistas en la sanidad pública.

España, el único país de la UE sin nutricionistas en la sanidad pública. Blogs de Tribuna. Hace ya años que existe la titulación universitaria en Nutrición Humana y Dietética reconocida por los estamentos públicos, pero sin que se incluyan nutricionistas en la Seguridad Social
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domingo, 27 de marzo de 2016

Cómo preparar una mona de pascua sin gluten y sin leche.

21/03/2016
Cada vez es más frecuente conocer a personas que tienen alguna alergia o intolerancia alimentaria. Por ello, el tema de este mes trata de cómo y qué cocinar cuando en casa hay un alérgico o un intolerante.
Las alergias e intolerancias alimentarias más comunes se producen con los siguientes alimentos: la leche, los huevos, el gluten, la fruta, los frutos secos, el pescado, el marisco y las legumbres.
Lo primero que hay que hacer para elaborar una receta para un alérgico a un determinado alimento es asegurarse de que los ingredientes que utilizaremos no contienen el elemento que provoca la intolerancia o la alergia. Esta información la encontraremos en la etiqueta del producto cuando éste está envasado, pero será necesario que la conozcamos cuando este es fresco o a granel.
Una vez que tenemos todos los ingredientes aptos, el siguiente paso es asegurarnos de que todos los utensilios que emplearemos están limpios. Cualquier resto de alimentos podría contaminarnos el plato. Por último, mientras lo elaboramos, tendremos que tener mucho cuidado con no utilizar nada que pueda contener el alérgeno en cuestión. Es decir, si antes habíamos separado todos los utensilios limpios, a media receta no podemos coger una cuchara que hayamos utilizado para otra preparación, o que tengamos por encima del mármol y no sepamos con qué alimentos había estado en contacto antes.
Aprovechando que se acerca Semana Santa, y que algunos padrinos y madrinas deberán hacer la mona de Pascua, os proponemos una receta para preparar una sin gluten ni leche y, por lo tanto, apta para personas celíacas, o intolerantes o alérgicas a la leche.

Mona de Pascua sin gluten y sin leche

Ingredientes para un molde para entre 4 y 6 personas:

Para el bizcocho:
  • 300 g de maíz (en lata)
  • 100 g de bebida de arroz
  • 200 g de azúcar
  • 200 g de harina de maíz
  • 90 ml de aceite de girasol
  • 4 huevos
  • 15 g de levadura en polvo
Para la crema:
  • 500 ml de bebida de arroz
  • 50 g de azúcar
  • 4 huevos
  • 40g de almidón de maíz
  • Piel de limón
  • Una rama de canela
  • Azúcar para quemar

Elaboración:

Para el bizcocho:
  1. Triturar el maíz, la bebida de arroz, el aceite y 100 gramos de azúcar. Si lo deseas, puedes colar la mezcla para obtener el pan sin grumos. Reservar la preparación.
  2. Separar las claras de las yemas. Batir las yemas con 50 gramos de azúcar, hasta que hayan doblado su volumen. Reservar.
  3. Batir las claras con el azúcar restante (50 gramos) a punto de nieve.
  4. Añadir con movimientos suaves las yemas a la mezcla de maíz. Seguidamente hacerlo con las claras.
  5. Verter sobre el molde previamente untado con mantequilla o un molde de silicona.
  6. Cocer en el horno durante 35 minutos a 170 grados.
Para la crema:
  1. Poner en un cazo 450 ml de bebida de arroz, la piel de limón, la canela, el azúcar y calentar, sin que llegue a hervir.
  2. A los 50 ml de bebida de arroz restantes añadir el almidón y remover.
  3. En un bol, batir las yemas de huevo y añadir el almidón disuelto.
  4. Verter la bebida de arroz hecha infusión a la mezcla de yemas y almidón.
  5. Volver a poner en el cazo y cocer removiendo hasta que tenga una textura espesa.
  6. Retirar del fuego y dejar enfriar.
Para terminar:
  1. Cortar el bizcocho por la mitad y rellenarlo de la mermelada que más te guste.
  2. Recubrir el bizcocho con la crema.
  3. Poner un poco de azúcar por encima de la crema y quemarlo con una pala o soplete.
  4. Añadir unas almendras laminadas y tostadas por los laterales.
  5. Decorar con los motivos de Pascua.
  6. http://faros.hsjdbcn.org/es/recomendacion/como-preparar-mona-pascua-sin-gluten-sin-leche

jueves, 24 de marzo de 2016

El trasplante de células madre hematopoyéticas no es eficaz en Crohn.

La enfermedad de Crohn es una patología crónica recurrente de carácter autoinmune, es decir, en la que el propio sistema inmune ataca a los órganos del afectado causándole inflamación. Una enfermedad en la que las lesiones pueden localizarse en cualquier punto del tracto gastrointestinal –esto es, desde el esófago hasta el recto– y que deteriora notablemente la calidad de vida del paciente, llegando incluso a reducir su esperanza de vida.
En el caso de los pacientes con Crohn en los que no está indicada la cirugía, el tratamiento consiste en la administración de fármacos inmunosupresores o en el trasplante de células madre hematopoyéticas –esto es, células madre formadoras de sangre–. Sin embargo, y según muestra un estudio llevado a cabo por investigadores del Queens Medical Centre de Nottingham (Reino Unido) y publicado en la revista «JAMA», este tipo de trasplante no solo no resulta eficaz para erradicar la enfermedad, sino que se asocia con numerosos efectos secundarios.
Como explica Christopher J. Hawkey, «en nuestro estudio fueron muy poco los pacientes en los que se logró erradicar la enfermedad, por lo que se puede concluir que el trasplante de células madre hematopoyéticas no es eficaz a la hora de alterar la historia natural de la enfermedad de Crohn. Por tanto,sugerimos que el uso de este tipo de trasplante no se realice en la práctica clínica y se limite a los ensayos clínicos».

Igual de eficaz, pero más tóxico

Para llevar a cabo el estudio, los investigadores llevaron a cabo un trasplante autólogo –es decir, del propio paciente– de células madres hematopoyéticas en 23 pacientes con enfermedad de Crohn no operable y resistentes al tratamiento con inmunosupresores. Y posteriormente, compararon los resultados con los obtenidos en un grupo control con otros 22 pacientes.
Todos los participantes en el estudio, llevado a cabo en 11 unidades de trasplante de hospitales europeos, tenían una edad entre los 18 y los 50 años.
Los resultados mostraron que, transcurrido un año desde la intervención, el trasplante de células madre hematopoyéticas se asoció con una tasa de remisión –o erradicación– de la enfermedad similar a la del grupo control. Además, el índice de actividad de la enfermedad de Crohn a los tres meses también fue igual para ambos grupos.que el trasplante de células madre hematopoyéticas no es eficaz a la hora de alterar la historia natural de la enfermedad de Crohn

En definitiva, como concluyen los autores, «es posible que la remisión sostenida tras el trasplante de células madre hematopoyéticas requiera del mantenimiento de terapia de inmunosupresores. Y es también posible que el trasplante posibilite que los pacientes respondan a tratamientos ante los que no había respuesta previa. Sea como fuere, la principal barrera para el trasplante de células madre hematopoyéticas en el paciente con enfermedad de Crohn es la toxicidad, por lo que deben identificarse los factores de riesgo de los efectos adversos para posibilitar que esta intervención sea útil en un futuro».
Es más; el trasplante de células madre hematopoyéticas se asoció con un mayor número de efectos adversos graves: 76, por 38 en el grupo control. De hecho, un paciente sometido a trasplante falleció a causa de los efectos secundarios. Así se explica que la cifra de participantes sometidos a trasplante que tuvo que abandonar el tratamiento prácticamente triplicó la del grupo control –61 frente a 32.

martes, 22 de marzo de 2016

La nutrición y el sistema inmunológico.

Nuestro sistema inmunológico nos protege de las bacterias, los virus y otros organismos patógenos. Se trata de un sistema de defensa complejo y eficaz. ¿Influye nuestra alimentación en el sistema inmunológico?
El sistema inmunológico constituye nuestra protección contra las enfermedades. Dada su complejidad, resulta muy difícil evaluar los efectos de la dieta en este sistema. Sin embargo, los resultados de diversas investigaciones han permitido identificar algunos factores dietéticos que afectan a la respuesta inmunológica de nuestro organismo.
Aparentemente, la ingesta energética tiene una influencia considerable en la actividad inmunológica. Las personas desnutridas presentan un mayor riesgo de contraer infecciones. Los regímenes de adelgazamiento de menos de 1.200 kcal al día también pueden hacer disminuir la función inmunológica, lo que constituye una buena razón para evitar las poco saludables "dietas milagrosas". Del mismo modo, el aporte excesivo de energía también puede afectar a la capacidad del sistema inmunológico de combatir las infecciones. La obesidad está ligada a una mayor incidencia de enfermedades infecciosas. Además, las personas obesas son más propensas a desarrollar enfermedades cardiacas coronarias, las cuales están relacionadas con alteraciones de la función inmunológica.
La reducción de las grasas en la dieta es importante para el control del peso, pero también influye en el funcionamiento del sistema inmunológico. Parece ser que las dietas ricas en grasas reducen la respuesta inmunológica, aumentando así el riesgo de infecciones. Por lo tanto, si se reduce el contenido de grasa en la dieta, la actividad inmunológica aumenta. De esta forma, además de prevenir las infecciones, se podría fortalecer el tipo de células inmunológicas que combaten las células tumorales. No obstante, no es sólo una cuestión de cantidad, también es importante la procedencia de las grasas. Es necesario incluir en nuestra dieta pescado azul, frutos secos, soja o aceite de linaza, para asegurar un aporte equilibrado de diferentes ácidos grasos.
El consumo regular de productos lácteos fermentados como el yogur o el kefir puede aumentar las defensas inmunológicas intestinales. Algunos estudios recientes sugieren que el yogur elaborado con ciertas bacterias, denominadas bacterias probióticas, puede tener un efecto beneficioso en el sistema inmunológico. Por ejemplo, los voluntarios que comieron a diario este tipo de yogur presentaron una mayor resistencia a los microorganismos que provocan las intoxicaciones alimentarias. Es preciso proseguir las investigaciones en este ámbito.
El mantenimiento del sistema inmunológico requiere un consumo constante de todas las vitaminas y minerales necesarios. Para ello, hay que asegurarse de seguir una dieta equilibrada que incluya frutas y verduras en abundancia, y yogures o productos similares. Hasta la fecha, la mayoría de las investigaciones indican que los complementos alimenticios no estimulan la respuesta inmunológica en individuos sanos y bien alimentados. Sin embargo, un estudio reciente realizado en ancianos demostró que un complemento de multivitaminas y minerales puede aumentar su función inmunológica.
References

Una niña de 10 años pide que los baños para discapacitados puedan ser utilizados por enfermos con EII.

El Parlamento escocés a instalado los signos en tres de sus baños accesibles.
Un miembro del parlamento escocés Iain Gray respalda la campaña promovida por Gracia Warnock de 10 años para que todo el mundo con discapacidad independiente mente de" si es o no visible", puedan utilizar los baños habilitados para discapacitados.
.Iain Gray MSP de 10 años de edad Gracia Warnock, un alumno de la escuela de Prestonpans en East Lothian, dan a conocer  un nuevo inodoro discapacitados, diseñados por Grace, que ahora está en su lugar en cuartos de baño accesibles del Parlamento escocés. La gracia tiene la enfermedad de Crohn y, al igual que muchas otras personas, utiliza aseos accesibles, ya que proporcionan el espacio y las instalaciones para gestionar los requisitos de su estado.A Gracia se le ocurrió la idea de esta señal para mostrar que las personas podrían no tener una discapacidad visible, pero todavía pueden requerir el uso de un aseo accesible.  Foto por Andrew Cowan / Parlamento escocés

Iain Gray MSP y 10 años de edad Gracia Warnock, un alumno de la escuela de Prestonpans en East Lothian, dan a conocer que un nuevo inodoro discapacitados, diseñados por Grace, que ahora está en su lugar en cuartos de baño accesibles del Parlamento escocés.  La gracia tiene la enfermedad de Crohn y, al igual que muchas otras personas, utiliza aseos accesibles, ya que proporcionan el espacio y las instalaciones para gestionar los requisitos de su estado.  La gracia se le ocurrió la idea de esta señal para mostrar que las personas podrían no tener una discapacidad visible, pero todavía pueden requerir el uso de un aseo accesible.  12 marzo de 2016. Foto - Andrew Cowan / Parlamento escocés

lunes, 21 de marzo de 2016

Empleo de probióticos y prebióticos en pediatría.

Román Riechmann E.1 y Álvarez Calatayud G.2
1Unidad de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Hospital Universitario Puerta de Hierro.
 Majadahonda
2Sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Hospital General Universitario Gregorio

 Marañón. Madrid


En condiciones normales las distintas superficies del organismo son colonizadas por un gran número
 de células microbianas. Dentro de estas superficies, el intestino es la zona más intensamente
 colonizada y constituye un ecosistema altamente dinámico. La microbiota intestinal desempeña 
un papel clave en la salud de los individuos, con funciones como la de proteger frente a la colonización
 de gérmenes patógenos, regular el tránsito intestinal, conjugar los ácidos biliares y promover la 
circulación enterohepática, fermentar los carbohidratos no digeridos, producir vitaminas y factores 
de crecimiento y, por último, la maduración del sistema inmunitario.
En la actualidad se da gran importancia a la modulación de esta microbiota intestinal mediante los
 alimentos funcionales, que son aquellos que añaden a la función nutritiva un efecto beneficioso sobre
 la salud. Algunos de estos alimentos tienen como constituyentes los probióticos (microorganismos
 vivos que administrados en cantidades adecuadas producen un efecto beneficioso en la salud y el 
bienestar del huésped), los prebióticos (carbohidratos no digeribles cuya ingestión induce el 
crecimiento de microorganismos beneficiosos) y los simbióticos, asociación de los dos anteriores.
Las principales especies de probióticos que se integran en alimentos son bacterias capaces de
 producir ácido láctico y que pertenecen a dos géneros principalmente: Lactobacillus, utilizados en
 la fermentación de alimentos y Bifidobacterium, gérmenes anaerobios estrictos. También se 
emplean microorganismos no bacterianos, comoSaccharomyces boulardii (levadura no patógena),
 y bacterias
 no patógenas como Streptococcus termophilus yEscherichia coli Nissle 1917. La nomenclatura 
considera el género, la especie y la cepa (código alfa numérico).
Los prebióticos son principalmente carbohidratos que no pueden ser digeridos por el intestino delgado
 y son fermentados por la microbiota del colon. De esta forma favorecen la proliferación de bacterias
 intestinales como son las bifidobacterias y los lactobacilos. En Europa los principales prebióticos
 utilizados en alimentación son los fructo-oligosacáriosos (FOS) y la inulina. Los FOS están incluidos
 de forma natural en especies vegetales como los espárragos, puerro, ajo, alcachofa, achicoria y
 cebolla. La inulina se encuentra en alimentos como trigo, cebolla, ajo, puerro y plátano. Estos 
preparados: 1) proporcionarían una barrera frente a microorganismos patógenos con lo que
 protegerían frente a la diarrea infecciosa y la asociada a antibióticos; 2) mejorarían la absorción de
 nutrientes como el calcio, potenciando la mineralización de los huesos; 3) por su indigestibilidad,
 pueden ser considerados como una forma de fibra soluble, contribuyendo a disminuir la consistencia
 de las heces, mejorando así el tránsito gastrointestinal,y reduciendo la formación de sustancias
 cancerígenas y por último, 4) por su efecto modulador del sistema inmunitario, podrían mejorar y
 prevenir procesos alérgicos como la dermatitis atópica.

Aplicaciones clínicas de los probióticos y prebióticos
Los probióticos se han utilizado en gran número de patologías pediátricas, principalmente en
 problemas gastrointestinales con alteración en la microbiota intestinal como la diarrea infecciosa,
 el sobredesarrollo bacteriano, la enterocolitis necrotizante y, más recientemente, en procesos
 inflamatorios crónicos como la enfermedad inflamatoria intestinal o en trastornos funcionales como
 el cólico del lactante o el estreñimiento. También se ha valorado su efecto beneficioso en
 alteraciones inmunológicas como la dermatitis atópica, en la prevención y tratamiento de la 
alergia alimentaria y, en los últimos
 años, en la prevención de patología del recién nacido pretérmino y en la infección por H. pylori
Además existen varias líneas de investigación abiertas en la complementación probiótica y prebiótica 
en la infancia.
La gran diversidad en el diseño de los estudios realizados justifica la gran variabilidad en los 
resultados de eficacia. De hecho, la mayoría de metaanálisis sobre estos estudios concluye que hay
 insuficientes trabajos de tratamiento con probióticos específicos en grupos definidos de pacientes
 para poder establecer guías definitivas de tratamiento. Hay que considerar que los diferentes
 probióticos emplean distintas estrategias de acción y que no todas las cepas probióticas presentan la
 misma resistencia ni capacidad de colonización y, por tanto, no tienen la misma eficacia clínica. Por
 ello, hay que considerar que los efectos en la práctica clínica son específicos de cepa y no están 
indicados para las mismas situaciones. Los datos agrupados de distintas cepas podrían llevar a falsas
 conclusiones. El empleo de los probióticos debería centrarse en hacer corresponder las cepas y dosis
 de producto utilizado a la situación para la que ha mostrado beneficio en los ensayos clínicos. A
 continuación se describen las principales aplicaciones del empleo de los probióticos y prebióticos en
 la infancia:
Diarrea aguda infecciosa
La mayor evidencia sobre la eficacia de los probióticos ha sido descrita en el tratamiento de la diarrea
 aguda infecciosa. Los mecanismos implicados son la estimulación del sistema inmunitario, la
 competencia por los sitios de adherencia en las células intestinales y la elaboración de sustancias
 neutralizantes de microorganismos patógenos. Las distintas revisiones sistemáticas realizadas sobre
 los estudios publicados con diferentes cepas concluyen, a pesar de la gran variabilidad de los mismos,
 que los probióticos producen un efecto beneficioso en la evolución de la diarrea aguda infecciosa.
 Concretamente, se ha observado una disminución del riesgo de diarrea al tercer día y la duración
 media, efectos evidenciados principalmente con Lactobacillus rhamnosus GG, L. reuteri y S. boulardii.
El efecto beneficioso de los probióticos es más significativo en las diarreas producidas por rotavirus,
 aunque también existen beneficios en las causadas por otros virus. No se ha podido demostrar
 su eficacia en las producidas por gérmenes invasivos, aunque un trabajo reciente con S. boulardii ha
 mostrado una mayor efectividad frente al metronidazol en el tratamiento de la diarrea por ameba.
 Hay evidencia muy limitada sobre su eficacia en el tratamiento de la diarrea persistente en niños. 
Los efectos beneficiosos fueron más notables cuanto más precozmente se administraron los 
probióticos en el curso de la enfermedad, no evidenciándose efectos adversos con su administración.
 Basándose en los datos anteriores, varias de las guías o recomendaciones vigentes de tratamiento 
de la gastroenteritis aguda, contemplan el empleo de probióticos de eficacia comprobada y a dosis
 adecuadas.
Hasta el momento son muy escasos los estudios que concluyen que el uso de probióticos reduce de
 forma significativa la incidencia de diarrea adquirida en la comunidad. Lactobacillus (rhamnosus, GG,
 reuteri y casei)han mostrado beneficio en la prevención de diarrea por rotavirus en guarderías,
 necesitando tratar a 7 niños para prevenir 1 caso. En niños hospitalizados, comparando la
 administración de Lactobacillus rhamnosus GG con placebo, el probiótico puede disminuir la incidencia
 global de diarrea asociada a cuidados sanitarios, incluida la diarrea por rotavirus.
Diarrea asociada a antibióticos
Los estudios realizados, principalmente hechos en adultos, han podido demostrar que la ingesta de
 probióticos en combinación con antibióticos reduce el riesgo de diarrea asociada a los mismos. Sin
 embargo, no hay, por el momento, estudios concluyentes para recomendar de manera rutinaria el 
empleo conjunto de probióticos y antibióticos, aunque algunas cepas, principalmente
 Saccharomyces boulardii y Lactobacillus GG, han demostrado su eficacia disminuyendo la
 incidencia de diarrea en 
pacientes con antibioterapia. Su administración debe realizarse al principio del tratamiento y no 
cuando se ha desencadenado el cuadro donde ya no son útiles.
Enfermedad inflamatoria intestinal
El empleo de probióticos en la enfermedad inflamatoria intestinal es, desde el punto de vista 
fisiopatológico, una buena alternativa terapéutica. Sin embargo, aunque los datos de los estudios 
realizados sugieren que tendrían un impacto favorable, sería deseable poder realizar más ensayos 
controlados y con mayor número de pacientes para poder aplicar en la práctica los efectos
 beneficiosos que tienen sobre la flora intestinal y que repercutirían positivamente en la enfermedad.
 Algunos preparados de probióticos se han mostrado eficaces en la colitis ulcerosa y en la reservoritis
 (sobre todo la mezcla VSL3).
Síndrome del intestino irritable
Aunque se desconoce la fisiopatología de este tipo de dolor abdominal funcional, hay datos que 
apoyan su relación con la microbiota intestinal, siendo ésta diferente de la de los individuos sanos.
 Además su instauración tiene relación en una tercera parte de los casos con procesos infecciosos
 gastrointestinales y se ha observado también en una alta proporción de estos pacientes cuadros
 compatibles con sobredesarrollo bacteriano. Un meta-análisis de 3 ensayos clínicos en niños sugiere 
una moderada mejoría con Lactobacillus GG.
Sobredesarrollo bacteriano
Los probióticos han demostrado ser eficaces en niños con sobrecrecimiento bacteriano intestinal
 como
 complicación de patologías como el intestino corto y el síndrome post-enteritis, ya que suprimen las
 bacterias patógenas, inducen una microbiota anaeróbica, aumentan los ácidos grasos de cadena 
corta en heces, disminuyen la inflamación y mejoran el estado nutricional. Se ha empleado con
 éxito Lactobacillus GG
 yLactobacillus plantarum 299V en niños afectos con intestino corto y sobrecrecimiento bacteriano
 que no respondieron al tratamiento antibiótico, con objeto de evitar graves complicaciones como
 la atrofia e
 inflamación intestinal.
Dolor abdominal
Los principios del tratamiento con probióticos de basan en la mejoría de la permeabilidad intestinal,
 en la regulación inmunitaria y de la respuesta inflamatoria, y en la regulación de la motilidad
 intestinal. Hay una limitación en los estudios realizados hasta la fecha, tanto desde el punto de
 vista
 metodológico como en las cepas empleadas o sus dosis. Se ha analizado el efecto de Lactobacillus
 GG en varios ensayos y, si bien se han encontrado resultados esperanzadores, parece que son
 necesarios más estudios para ver la eficacia de los probióticos en el dolor abdominal en la infancia.
Estreñimiento
El uso de los probióticos como terapia del estreñimiento se basa en el desequilibrio de la microbiota
 intestinal que se ha observado en los niños que lo padecen, pero no está claramente establecida su
 eficacia en la edad pediátrica. Parecen tener un efecto positivo aunque poco importante en el 
número
 de deposiciones semanales, pero la mayoría de los estudios se han realizado en adultos.
El empleo de prebióticos (fibra dietética soluble) aumenta la capacidad de retención de agua de las 
heces y estimula el crecimiento de las bifidobacterias probióticas, aumentando la media de 
deposiciones y disminuyendo su consistencia. La inulina y los FOG poseen efectos laxantes
 dosis-dependientes que se atribuyen al aumento de la biomasa microbiana como resultado de su
 fermentación en el colon a diferencia de la fibra alimentaria insoluble que aumenta la masa fecal al
 favorecer la retención de agua.
Cólico infantil
Su empleo se basa en la existencia de una microbiota colónica anormal en los lactantes con cólicos.
 Su mecanismo de acción se basa en mejorar la motilidad intestinal y ejercer efectos directos en la
 vía nerviosa del dolor visceral. Se ha estudiado la cepa de Lactobacillus reuteri DSM 17938,
 administrada en forma liofilizada a una dosis de 108 ufc/día en suspensión, 30 minutos antes de la
 primera toma del día. La tasa de respuesta (disminución del tiempo de llanto) fue significativamente
 mayor en los lactantes tratados con L. reuteri frente al placebo. Su uso, en combinación con otras
 medidas terapéuticas, tiene la finalidad de conseguir un plan de tratamiento individualizado efectivo 
y seguro.
Infección por Helicobacter pylori
Se han observado en pacientes pediátricos menos efectos secundarios y mejor tolerancia a la triple
 terapia, con la adición de prebióticos al tratamiento antibiótico. Actuaría por mecanismos
 inmunológicos y no inmunológicos, produciendo sustancias antimicrobianas, compitiendo por la
 adhesión a la célula intestinal y proporcionando una barrera mucosa. Los escasos estudios
 realizados
 en niños muestran una disminución de los efectos secundarios del tratamiento antibiótico con los
 probióticos, aunque sin evidencia clara de una mayor tasa de erradicación, habiéndose utilizado
 Lactobacillus GG, Lactobacillus reuteri y mezcla de varias cepas.
Enterocolitis necrotizante
El uso de suplementos enterales de probióticos puede reducir la incidencia de ECN, el riesgo de ECN
 severa (estadio 2 ó más) y la mortalidad en prematuros. La seguridad y eficacia de estos 
suplementos necesita mayor evaluación para neonatos < 1.000 g de PRN. Dado el riesgo potencial
 de la administración de bacterias vivas en grandes dosis en neonatos inmunológicamente inmaduros,
 generalmente afectados de otras enfermedades, se hace necesaria la realización de más estudios
 controlados y multicéntricos para evaluar su eficacia y seguridad, sobre todo, si se van a utilizar
 otras cepas de probióticos que han resultado beneficiosas en otras patologías gastrointestinales.
 Por ello, algunos autores advierten ser más cautelosos en la introducción de probióticos en
 prematuros de manera rutinaria hasta determinar mejor la seguridad, calidad, dosis y duración
 óptimas de tratamiento, comparación con leche materna exclusiva y evaluar los efectos a largo
 plazo.
Intolerancia a la lactosa
Si bien, hay estudios que demuestran una mejor digestión de lactosa y menor excreción de
 hidrógeno
 en el aire espirado en estos pacientes que consumen lácteos fermentados, en la actualidad, no
 existe
 evidencia suficiente para recomendar el uso de probióticos en el manejo sistemático de la
 intolerancia a la lactosa.
Enfermedad celiaca
Aunque en la actualidad el único tratamiento de la enfermedad celiaca sea una dieta exenta de
 gluten, es posible que, basándonos en la alteración de la microbiota intestinal existente en estos 
pacientes, en un futuro la administración de bifidobacterias pueda producir efectos beneficiosos, 
aunque para ello son necesarios más estudios.
Obesidad
La modulación de la microbiota intestinal constituye un objetivo fundamental en la búsqueda de
 nuevos tratamientos preventivos de la obesidad y la investigación en esta área sigue en la
 actualidad. Aunque esta línea de investigación está tan sólo en su inicio e implica a bacterias no 
consideradas clásicamente como probióticos, los estudios realizados están aportando una información
 clave para conocer nuevos factores implicados en el desarrollo de la obesidad y las enfermedades
 metabólicas, así como para mejorar las estrategias de intervención nutricional para prevenirlas.
Malnutrición
En la actualidad no existen estudios multicéntricos que aclaren los beneficios y recomienden el uso
 de los probióticos en la malnutrición severa; pero está claro, que estos agentes terapéuticos juegan
 un papel importante en la inmunidad y en el equilibrio de la flora bacteriana intestinal, teniendo un
 impacto importante en la malnutrición. Se espera que en un futuro surjan más estudios para definir 
el rol de los probióticos en situaciones nutricionales deficitarias.
Fibrosis quística
El tratamiento con probióticos, además de una alternativa al tratamiento descontaminante con
 antibióticos, también puede mejorar la función intestinal en la fibrosis quística, tanto clínica como
 bioquímicamente. Por tanto, su administración podría ser pautada de una manera regular. Los
 estudios realizados ofrecen un panorama prometedor, pero hasta el momento se trata de estudios 
piloto, que incluyen pocos pacientes y no tienen en cuenta la multitud de factores que influyen en la
 patogenia de esta enfermedad, por lo que es necesaria mayor investigación y tomar estos datos
 como preliminares.
Enfermedades atópicas
La teórica relación entre la composición de la microbiota intestinal y el eczema, con una posible 
alteración de la permeabilidad intestinal y presencia de marcadores de inflamación, ha sido la base
 para el empleo de probióticos en esta patología. Los estudios disponibles con suplementación de
 probióticos a niños de riesgo atópico frente a placebo para modificar el desarrollo precoz de su
 microbiota intestinal, no han observado una mejoría clara del eczema, por lo que es necesario
 confirmar este beneficio en niños con riesgo atópico en los primeros 6 meses de vida.
Alergia alimentaria
Un reciente estudio plantea la posibilidad de una más precoz adquisición de tolerancia en la alergia 
a proteínas de leche de vaca, tanto mediada por IgE como no mediada por IgE, con la utilización de 
un hidrolizado de proteínas de leche de vaca suplementado con Lactobacillus GG.
Suplementación de fórmulas lácteas infantiles
Una reciente revisión del Comité de expertos de la Sociedad Europea de Gastroenterología,
 Hepatología y Nutrición Pediátrica (ESPGHAN) establece respecto a los posibles beneficios en la 
administración de fórmulas suplementadas con probióticos a lactantes menores de 4-6 meses y según
 la evidencia disponible, que tanto en la frecuencia como en la consistencia de las deposiciones podía
 haber un modesto beneficio con la aportación de LGG. En los lactantes mayores los posibles
 beneficios serían sobre las infecciones gastrointestinales (B. lactis), disminución en el empleo de
 antibióticos (B. lactis y S thermophilus ó L reuteri) y en la irritabilidad del cólico (B. lactis o S
 thermophilus).
En relación a los prebióticos, no se puede realizar una recomendación general y considera que su 
suplementación en la dieta tiene la capacidad de incrementar el número de bifidobacterias 
beneficiosas en las heces y disminuye la consistencia de las mismas con efecto beneficioso en el 
estreñimiento. No se han encontrados efectos adversos en cuanto al uso de prebióticos en la 
alimentación infantil y es necesaria más información antes de un uso generalizado en niños 
prematuros y en niños con problemas especiales como inmunodeficiencias.

Referencias
1. Allen SJ, Martinez EG, Gregorio GV, Dans LF. Probiotics for treating acute infectious diarrhoea.
 Cochrane Database Syst Rev 2010; Nov 10;(11): CD003048.         [ Links ]
2. Braegger C, Chmielewska A, Decsi T, Kolacek S, Mihatsch W, Moreno L, et al. Supplementation of
 infant formula with probiotics and/or prebiotics: a systematic review and comment by the ESPGHAN 
committee on nutrition. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2011; 52: 238-250.         [ Links ]
3. Ciorba MA. A gastroenterologist s guide to probiotics. Clin Gastroenterol Hepatol 2012; 10: 960-
968.         [ Links ]
4. ESPGHAN Working Group on Probiotics and Prebiotics, Szajewska H, Weizman Z, Abu-Zekkry M, 
Kekez AJ, Braegger CP, Kolacel S, et al. Inulin and fructo-oligosaccharides for the prevention of 
antibiotic-associated diarrhea in children: report by the ESPGHAN Working Group on Probiotics and 
Prebiotics. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2012; 54: 828-829.         [ Links ]
5. Floch MH, Walker WA, Madsen K, Sanders ME, Macfarlane GT, Flint HJ, et al. Recommendations
 for probiotic use-2011 update. J Clin Gastroenterol 2011; 45: S168-171.         [ Links ]
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prevention and treatment of antibiotic-associated diarrhea: a systematic review and meta-analysis.
 JAMA 2012; 307: 1959-1969.         [ Links ]
7. Szajewska H, Wanke, M Patro B. Meta-analysis: the effects of Lactobacillus rhamnosus GG 
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8. Thomas DW, Creer FR and Comité on Nutrition. Probiotics and prebiotics in Pediatrics. Pediatrics
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 Gastroenterología. Octubre 2011. www.Worldgastroenterology.org/probiotics-prebiotics.html.      
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Jornada para pacientes sobre el abordaje del cáncer de colon.

La Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) está decididamente comprometida con la lucha contra el cáncer de colon, y en especial con su prevención y diagnostico precoz. Con este fin desde la FEAD organizamos una jornada para pacientes sobre el abordaje del cáncer de colon el próximo 15 de abril a las 16:30 en la sede de la Fundación (Sáncho Dávila, 6, 28028, Madrid). 

La jornada será impartida por expertos de la especialidad y constituirá un foro de diálogo con los pacientes asistentes. Algunos de los temas fundamentales que se abordarán serán: 
  • - Situación del cáncer colorrectal en España (incidencia-mortalidad)
  • - Factores de riesgo que pueden predisponer a desarrollar un tumor de colon
  • - Formas de presentación: esporádica, familiar, hereditaria
  • - Síntomas de alarma 
  • - Importancia de la prevención y del diagnóstico precoz para el pronóstico de los pacientes: pruebas y programas de cribado
  • - Prevención: ¿qué hubiera mejorado si hubiera tenido un diagnóstico precoz? 
  • - Pronóstico y seguimiento
  • - ¿Van a heredar el cáncer mis hijos?
  • - ¿Cómo puedo ayudar como paciente a la concienciación/prevención del cáncer de colon?

La jornada se completará con un diálogo sobre diversos aspectos relacionados con el cáncer de colon como la dieta, tóxicos, ejercicio físico y fármacos, entre otros. Además contará con un espacio abierto al intercambio de testimonios de pacientes y un turno de dudas y preguntas. 
Puedes inscribirte en: comunicacion@saludigestivo.es / 914.021.353
Aforo limitado (se ruega confirmación)
Si no puedes asistir, podrás seguir la retransmisión en streaming a través de la web www.saludigestivo.es