En la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII), que incluye el Crohn y la Colitis Ulcerosa, los síntomas intestinales son predominantes pero pueden ocurrir complicaciones extraintestinales .
Según un estudio recientemente publicado, las manifestaciones extraintestinales de la EII afectan a más de un 20% de las personas con esta enfermedad y las más comunes son las manifestaciones articulares (en las articulaciones) y las orales (en la cavidad bucal).
Las lesiones en la cavidad bucal de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII) aparecen en un 5-10% de las personas con esta enfermedad, especialmente en los pacientes con enfermedad de Crohn.
Las lesiones orales de la EII incluyen varios tipos, las más comunes son las aftas ( una úlcera o llaga abierta y dolorosa en la boca) y las menos comunes son las lesiones granulomatosas en la cavidad bucal que pueden aparecer en la enfermedad de Crohn. El compromiso oral puede ser previo o simultáneo a los síntomas gastrointestinales.
En algunos pacientes, los síntomas intestinales pueden ser mínimos e indetectables, por lo tanto en aquellos pacientes en los que se se presenten estar alteraciones en la boca, se deberá sospechar una enfermedad intestinal aún en la ausencia de síntomas específicos.
Estas lesiones orales son más comunes en la enfermedad de Crohn que en la Colitis Ulcerosa y más en hombres y niños.
Además de las manifestaciones orales, la anemia es otra enfermedad que se observa a menudo en los pacientes con Enfermedad Inflamatoria Intestinal, y en aproximadamente un tercio de de ellos se detectan niveles bajos de hemoglobina. La pérdida de sangre a nivel intestinal de forma crónica, reduce los niveles de hierro, provoca anemia, altera la absorción de la vitamina B12 y ácido fólico.
Las deficiencias en la dieta y la disminución de la absorción de vitaminas y nutrientes como el zinc y el hierro, como consecuencia de los propios síntomas intestinales de la enfermedad, también pueden desencadenar alteraciones en la mucosa oral.
Las manifestaciones orales de la EII son poco comunes pero pueden ser la única evidencia clínica de una enfermedad sistémica que subyace. Las lesiones pueden aparecer en forma concomitante o preceder el diagnóstico de una EII y la detección temprana es beneficiosa para el paciente.
Si detectas algún tipo de lesión en la boca, especialmente si son recurrentes, tales como: llaguitas, inflamación de las encías, hinchazón en los labios, fisuras, o cambios en la mucosa de la boca y lengua u otras ¡Consulta con tu médico!
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