jueves, 25 de marzo de 2021

Un fármaco para la enfermedad inflamatoria intestinal reduce la respuesta contra la covid-19.

Un nuevo estudio revela que los pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal, que engloba tanto colitis ulcerosa como enfermedad de Crohn, pueden tener más riesgo de reinfección ante el coronavirus y podrían impulsar la aparición de nuevas variantes. Este grupo requiere una observación más estrecha para asegurar que la inmunidad adquirida por las vacunas funciona.

23/3/2021

 Infliximab, un potente fármaco empleado en el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal (que incluye a pacientes con enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa), reduce la respuesta inmunitaria contra la infección por covid-19, según publica un estudio británico publicado en el último número de la revista Gut.

Por un lado, este medicamento estaría ligado a un aumento del riesgo de reinfección por coronavirus y una mayor susceptibilidad ante la covid persistente. Por otro, si el coronavirus cronifica su infección en estos pacientes, podrían actuar como reservorios de SARS-CoV-2 e impulsar la aparición de nuevas variantes, según alertan los autores del nuevo trabajo.

Los autores aconsejan que los pacientes tratados con infliximab tengan una monitorización más estrecha tras recibir la vacuna contra la covid-19

 

Los autores aconsejan que los pacientes tratados con infliximab tengan una monitorización más estrecha tras recibir la vacuna contra la covid-19 para asegurar que adquieren una buena respuesta de anticuerpos que les proteja contra la infección.

Infliximab pertecene a una clase de medicinas llamada inhibidores de factor de necrosis tumoral (anti-TNF). Estos fármacos suprimen la producción de una proteína inflamatoria implicada en el desarrollo de varias afecciones, como la colitis ulcerosa y Crohn.

Unas dos millones de personas en todo el mundo reciben un tratamiento de anti-TNF, del que se sabe que disminuye la protección inmunitaria tras la vacunación contra neumonía, gripe y hepatitis vírica. Al tiempo, aumenta el riesgo de infecciones graves, especialmente las respiratorias.

Unas dos millones de personas en todo el mundo reciben un tratamiento de anti-TNF, como infliximab

 

Por ello, las autoridades en Reino Unido recomiendan a las personas que se medican con estos fármacos una mayor protección en la pandemia mediante el protocolo shielding o blindaje contra la covid-19.

Menos de la mitad de pacientes con anticuerpos detectables

Estos resultados surgen del estudio CLARITY IBD, que reclutó a 6.935 pacientes con alguna enfermedad inflamatoria intestinal o EII de 92 hospitales de Reino Unido entre septiembre y diciembre de 2020. El objetivo era conocer el impacto de las terapias biológicas (como infliximab) e inmunomodulatorias en la infección por SARS-CoV-2 y en la inmunidad de los pacientes con EII.

Para comparar el impacto de este fármaco en la respuesta inmunitaria, también estudiaron a pacientes que tomaban vedolizumab, un medicamento de anticuerpos monoclonales con una posología similar al infliximab pero que no está asociado a un mayor riesgo de infección ni a una reducción en la respuesta inmunitaria.

La escasa respuesta de anticuerpos aumenta la posibilidad de que estas personas no desarrollen una protección tras la covid-19 y tengan un mayor riesgo de reinfectarse

Tariq Ahmad, director del estudio CLARITY IBD

A pesar que ambos grupos de pacientes (4.685 que tomaban infliximab, 2.250 con vedolizumab) presentaban ratios similares de infección por covid-19, los investigadores encontraron que menos de la mitad (el 48 %) de los pacientes con EII que habían sido tratados con infliximab presentaban anticuerpos detectables tras la infección de SARS-CoV-2, en comparación con el 83 % de los tratados con el otro fármaco.

Además, se observó un aumento en los anticuerpos de coronavirus cuatro semanas después en pacientes con vedolizumab, pero no en los que tomaban el infliximab.

El director del estudio CLARITY e investigador de la Universidad de Exeter (Reino Unido), Tariq Ahmad, señala que la escasa respuesta de anticuerpos observada en pacientes con infliximab “aumenta la posibilidad de que estas personas no desarrollen una protección tras la infección de covid-19 y tengan un mayor riesgo de reinfectarse”. Por otro lado, desconoce cómo afectará este fármaco (y otros anti-TNF) en la vacunación, aunque sugiere que deberá hacerse un seguimiento estrecho.

El estudio está dirigido por gastroenterólogos de la Fundación NHS del Hospital Royal Devon and Exeter y de la Facultad de Medicina de la Universidad de Exeter, y cuenta con el apoyo de la asociación Crohn y Colitis Reino Unido y del Instituto Nacional de Investigación Sanitaria (NIHR).

Limitaciones del estudio

El trabajo está basado en un estudio observacional, por lo que los autores recalcan que no se puede establecer una causa clara de por qué se produce esta reducción de la respuesta inmunitaria contra la covid-19. Asimismo, los investigadores reconocen otras limitaciones, como que una respuesta inmunitaria más débil no se traduce automáticamente en un mayor riesgo de infección y que se ha estudiado solo un fármaco anti-TNF.

Los investigadores reconocen algunas limitaciones de estudio, como que una respuesta inmunitaria más débil no se traduce automáticamente en un mayor riesgo de infección

 

No obstante, sugieren que una respuesta debilitada de anticuerpos tiene muchas implicaciones. Por ejemplo, estos pacientes pueden ser más susceptibles de desarrollar covid-19 persistente y cronificar la colonización del virus en nariz y garganta. “Esto podría actuar como un reservorio que impulse una transmisión persistente del coronavirus y nuevas variantes del SARS-CoV-2”, advierten.

“Deberían considerarse campañas de test serológicos y una vigilancia del virus para detectar respuestas insuficientes a las vacunas, infecciones persistentes y evoluciones virales”, concluyen.

Referencia:

Kennedy NA, Goodhand JR, Bewshea C, et al. “Anti- SARS- CoV-2 antibody responses are attenuated in patients with IBD treated with infliximab”. Gut (2021). DOI: 10.1136/gutjnl-2021-324388

https://www.agenciasinc.es/Noticias/Un-farmaco-para-la-enfermedad-inflamatoria-intestinal-reduce-la-respuesta-contra-la-covid-19

Actualización e información sobre el CORONAVIRUS (COVID-19) para pacientes con EII.

 Última actualización 12/01/2021

El conocimiento sobre el coronavirus (COVID-19) sigue acumulándose durante esta epidemia mundial. El virus causa especial preocupación en los pacientes con EII (enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa). Aquí hay algunos datos y consejos útiles para ayudarle a tomar las mejores decisiones durante estos tiempos y también para ayudarle en caso de que esté viajando

¿Cuáles son los síntomas de la infección por el coronavirus?

En la mayoría de las personas infectadas no habrá síntomas o síntomas parecidos a los de la gripe de fiebre, tos o falta de aliento, y algunos pueden experimentar dolor muscular, dolor de garganta, pérdida del sentido del gusto/olor y a veces diarrea. Sin embargo, en la minoría de los pacientes la enfermedad puede llegar a ser grave y poner en peligro la vida.

¿Cómo se propaga el virus y qué puedo hacer para protegerme?

El coronavirus se propaga por medio de gotitas respiratorias producidas cuando una persona infectada tose o estornuda, pero el virus también se ha aislado en las heces de personas infectadas y permanece viable en las superficies físicas. Por lo tanto, la propagación fecal-oral y la propagación por contacto físico también pueden ser potencialmente plausibles. Se debe mantener un lavado de manos frecuente, evitar el contacto cercano (<2 metros) con otras personas y cualquier contacto con personas enfermas, evitar las reuniones sociales y cumplir con otras recomendaciones locales de las autoridades sanitarias nacionales. Dado que se han registrado varios informes de reinfección con COVID-19 en pacientes que se recuperaron previamente de la enfermedad, estas precauciones deben cumplirse independientemente de que usted haya tenido anteriormente la enfermedad de COVID-19. La vacunación contra COVID-19 también debe ser considerada como el principal modo de protección (ver más abajo). Las implicaciones de las mutaciones recientemente descubiertas del virus todavía están siendo evaluadas en este momento por sus posibles efectos en la propagación del virus y la inmunidad después de una enfermedad o vacunación previa.

¿Puedo recibir la vacuna COVID-19 si tengo EII? ¿Puedo recibirla si estoy usando inmunosupresores o biológicos?

Se están desarrollando varias vacunas para COVID-19. En el momento de esta actualización, dos vacunas basadas en ARNm (de las compañías Pfizer y Moderna) han sido aprobadas en Canadá y por la FDA en los EE.UU. y una (Pfizer) también por la Unión Europea. Aunque las vacunas de ARN son relativamente nuevas y la experiencia a largo plazo es limitada, desde 2017 se han realizado ensayos de vacunas de ARNm para otras enfermedades sin que se hayan desarrollado señales de alerta, con un seguimiento de hasta tres años de los varios cientos de personas que participaron en esos ensayos. Es importante saber que el ARNm no puede unirse o alterar el ADN y que se degrada muy rápidamente en las células humanas, por lo que no persiste mucho tiempo en el cuerpo. Las vacunas de ARNm no son "vacunas vivas" ya que están compuestas por una partícula molecular no viva, que no tiene potencial para convertirse en infecciosa. Por lo tanto, y aunque los pacientes con EII no se incluyeron en la población estudiada de las vacunas de ARNm, estas vacunas se consideran generalmente seguras para los pacientes inmunosuprimidos o que reciben productos biológicos. Dado que cualquier vacuna puede estimular el sistema inmunológico, existe un riesgo leve pero puramente teórico de aumentar la actividad de la EII o de instigar trastornos autoinmunes, pero la mayoría de los expertos creen que los riesgos de COVID-19 superan estos riesgos puramente teóricos y aconsejan a los pacientes con EII que se pongan la vacuna. 

Otras vacunas que se están desarrollando son vacunas de virus inactivados ("muertos") o compuestas únicamente de proteínas virales, por lo que carecen de todo potencial de infección y, en principio, también deberían ser seguras para los pacientes inmunodeprimidos. Una de estas vacunas de SinoPharm ya está disponible para su uso en China, los Emiratos Árabes Unidos y Bahrein. En cambio, varias empresas están desarrollando vacunas que utilizan un virus vivo atenuado diferente para transportar partículas COVID-19 al cuerpo. Estas vacunas vivas, como las que utilizan el virus portador del adenovirus desarrollado por Johnston & Johnston, AstraZeneca y el instituto ruso Gamaleya, pueden tener potencial infeccioso en personas inmunodeprimidas y, por lo tanto, están generalmente contraindicadas para esos pacientes. Sin embargo, como regla general, debido a los rápidos cambios en este campo y a las distintas reglamentaciones, debe seguir las directrices nacionales más actualizadas en relación con las vacunas COVID-19. 

¿Mi EII o mis medicamentos me ponen en mayor riesgo de tener una enfermedad grave si me infecto con el coronavirus? ¿Debo por lo tanto dejar de tomar mis medicamentos?

Los ancianos, las personas con hipertensión, diabetes o enfermedades pulmonares o cardíacas crónicas, las personas con sobrepeso y los fumadores pueden correr un mayor riesgo de padecer una enfermedad más grave por el coronavirus. En ninguno de los informes se ha encontrado hasta ahora que los pacientes con EII en su conjunto, incluida la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, tengan un mayor riesgo de contraer la enfermedad o de padecer una enfermedad más grave. 

Se ha establecido un registro internacional de pacientes con EII infectados con el coronavirus COVID-19 con el nombre de SECURE-IBD (https://covidibd.org/).  Al 22 de diciembre de 2020 había 4038 pacientes de EII en todo el mundo que fueron reportados al registro después de haber sido infectados con el coronavirus. De estos, 2859 pacientes estaban inmunosuprimidos, y 1179 no lo estaban. Se considera que los pacientes que toman corticoesteroides, azatioprina, 6-Mercaptopurina, metotrexato, tofacitinib o drogas biológicas están inmunosuprimidos. 

Los datos actuales del registro SECURE, así como los estudios comunicados por los Estados Unidos y otros países, muestran que la enfermedad grave o la muerte no se producen con mayor frecuencia en los pacientes que toman medicamentos inmunosupresores o biológicos en comparación con los pacientes con EII que no toman estos medicamentos. Los únicos factores que se ha comprobado que predisponen a un mayor riesgo de padecer una enfermedad COVID-19 más grave en los pacientes que contrajeron el virus fueron el uso simultáneo de corticoesteroides cuando se infectaron por el virus. También es posible que los pacientes con EII con actividad no controlada de EII también tengan un mayor riesgo, pero esto no ha sido determinado de manera decisiva por todos los estudios...   

En general, los datos hasta la fecha no muestran que los pacientes con EII tengan un mayor riesgo de contraer el coronavirus o de desarrollar una enfermedad grave debido a sus medicamentos, y los pacientes deben reconocer los riesgos de dejar de tomar medicamentos para la EII y de experimentar brotes de la enfermedad y complicaciones. Por lo tanto, las sociedades de expertos en gastroenterología, entre ellas la Asociación Americana de Gastroenterología y la Organización Europea de Crohn y Colitis (ECCO), recomiendan continuar con los medicamentos para la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. 

Sin embargo, los pacientes que reciben dos tipos de medicamentos inmunosupresores, como un biológico y un inmunomodulador, y los que están en corticoesteroides, deben discutir con su médico si uno de estos medicamentos puede ser descontinuado de manera segura.

¿Debo dejar la medicación si estuve expuesto a una persona enferma o si yo mismo estoy enfermo?

En general, la exposición a una persona enferma no se considera una razón para detener o suspender los medicamentos, pero la decisión individualizada debe ser tomada con su médico. Si usted desarrolla síntomas parecidos a los de la gripe, ya sea que se le haya diagnosticado el coronavirus o no, que no sean los recomendados durante cualquier gripe u otra enfermedad infecciosa activa, debe ponerse en contacto con su equipo de EII y suspender los medicamentos inmunosupresores hasta que los síntomas se resuelvan. No es necesario interrumpir los medicamentos no inmunosupresores como la mesalamina.

¿Debo evitar ir al hospital, a la clínica o al centro de infusión en estos momentos?

Las visitas clínicas no esenciales pueden ser reconsideradas, después de un adecuado asesoramiento de su equipo. Algunas visitas a la clínica pueden ser reemplazadas por consultas de tele-medicina si están disponibles. No se deben evitar las visitas esenciales como las visitas a la sala de emergencias por una exacerbación grave de la EII o la obtención de infusiones biológicas en centros de infusión.

Me quedé retenido en otro país mientras viajaba, y se me están acabando los medicamentos para la EII. ¿Qué puedo hacer hasta que pueda volar de vuelta a casa?

Si los bloqueos de vuelos le han obligado a prolongar su estancia fuera de su país de origen, le sugerimos que mire nuestra página web 'IBD Network' donde puede encontrar detalles de más de 330 centros de EII en todo el mundo que se han unido a nosotros para proporcionar atención y ayuda en la administración de productos biológicos a los pacientes con EII en el extranjero (es necesario ser un usuario registrado de IBD Passport para acceder a esta red). Le sugerimos que se acerque al centro en el que se encuentra, para obtener ayuda local en el suministro de medicamentos. Si todavía no hay ningún centro de nuestra red en el país donde se encuentra, puede enviarnos un correo electrónico a info@IBDpassport.com e intentaremos ayudarle utilizando nuestras conexiones globales, pero tenga en cuenta que nuestra respuesta puede sufrir un ligero retraso debido a la abrumadora cantidad de consultas y solicitudes en estos momentos.


https://www.ibdpassport.com/es/coronavirus

lunes, 1 de marzo de 2021

Jove logra la cura de la inflamación intestinal en ratones con células madre.

 Luján Palacios

El equipo del doctor Francisco Vizoso, en la Fundación Hospital de Jove, es pionero en utilizar las secreciones de las células madre para el tratamiento de diversas enfermedades inflamatorias. Uno de los últimos campos en los que esta técnica se ha demostrado eficaz es en la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) que aglutina varias dolencias ligadas al aparato digestivo, principalmente colitis y Crohn, con más de 6.000 personas diagnosticadas en la región y cerca de 200.000 en el ámbito nacional.

El equipo lleva embarcado en investigaciones en este ámbito desde hace años, y el doctor Vizoso presentó ayer, en el marco de las Jornadas de Coloproctología del Hospital de Cabueñes, algunas de las primeras conclusiones de las pruebas llevadas a cabo en el laboratorio con ratones. Los resultados “son muy buenos y abren un gran campo de desarrollo”, afirma.

Tal y como explica Vizoso, los ensayos se han llevado a cabo aplicando el secretoma de células madre uterinas a ratones a los que se ha provocado úlceras en el colon. “Utilizamos ese producto de las células liofilizado, en polvo, y lo mezclamos con un hidrogel desarrollado en colaboración con la Universidad de Santiago de Compostela”, indica el investigador.

Tras inducir la enfermedad en los animales,” observamos que adelgazaban, tenían diarreas y su estado empeoraba”. Tras aplicarles lavativas con el hidrogel y el secretoma de las células, “los ratones empezaron mejorar. Vimos que la colitis se curaba y los animales empezaban a ganar peso, el colon ya no estaba inflamado”.

Este primer paso es el primero en un largo camino hasta los ensayos con humanos, y ha generado muy buenas sensaciones entre los científicos. “Los resultados son espectaculares, tenemos que seguir trabajando para llegar al ensayo con humanos”, apunta Vizoso, antes de señalar que para ello se están aplicando técnicas de biotecnología “muy complejas”. Gracias al hidrogel el producto se adhiere a las paredes del colon, y la esperanza de curación es muy elevada como ya sucede con el tratamiento de las fístulas perianales con este mismo sistema.

De momento, la utilización de las células madre en este caso se ha demostrado “mucho más efectiva que los corticoides, que son los antiinflamatorios más potentes que hay, pero sin los importantes efectos secundarios que estos tienen, porque se trata de un producto natural, obtenido de mujeres normales”. Las células uterinas se obtienen en la actualidad de donaciones de las mujeres que se someten a histerectomía (extirpación del útero) o de muestras de citologías.

Selección

En este sentido Vizoso apunta como retos de futuro el seguir analizando qué células madre son las más adecuadas para el tratamiento de cada dolencia, puesto que “no son lo mismo las células madre uterinas que las obtenidas de la médula espinal o de los tejidos grasos”.

Y también será clave investigar para dar con los mejores donantes posibles, puesto que en el caso de las personas con enfermedades sistémicas “existe una alteración de las células madre”. Lo que cada vez está más claro, recalca, es que las células madre “abren la puerta a la curación” de numerosas enfermedades inflamatorias y “necesitamos financiación para seguir con los ensayos” y llegar a la producción de fármacos que mejoren la calidad de vida de los pacientes.

https://www.lne.es/gijon/2021/02/25/jove-logra-cura-inflamacion-intestinal-35534411.html